La frecuencia y la distancia a la que los conductores con niveles moderados de visión borrosa y cataratas distinguen a los peatones se ven muy reducidas por la noche, según un estudio publicado en Investigative Ophthalmology & Visual Science. “La visión borrosa y las cataratas son muy comunes...
El estudio ha descubierto que incluso las dificultades visuales moderadas rebajan la habilidad de los conductores para ver a los pasajeros por la noche, especialmente cuando se padecen cataratas. De hecho, los conductores con visión borrosa se dieron cuenta de la presencia de los peatones un 52,1% del tiempo, mientras que esta cifra se redujo al 29,9% en los conductores con cataratas.
Por otra parte, los peatones que llevaban elementos reflectantes resultaban más visibles para los conductores (82,3% del tiempo) que los que iban vestidos de negro (13,5% del tiempo). Tanto si el deslumbramiento estaba presente como si no, ninguno de los conductores con cataratas fue capaz de distinguir a los peatones vestidos de negro.