Los ópticos-optometristas María Jesús González y Genís Cardona imparten este sábado 9 de febrero el curso 'Ojo seco y lentes de contacto: protocolos', en la sede del Colegio Nacional de Ópticos-Optometristas.
María Jesús González García es diplomada en Óptica y Optometría, así como doctora en Ciencias de la Visión. Ha dedicado gran parte de su experiencia a dar cursos de formación tanto a nivel profesional como docente, y destaca por sus investigaciones en torno al síndrome del ojo seco y la intolerancia a las lentes de contacto.
En este tema comparte muchos conocimientos con su compañero Genís Cardona Torradeflot, que ha cursado la diplomatura en Óptica y posee un doctorado en el Department of Optometry and Vision Sciences de la University of Manchester Institute of Science and Technology de Reino Unido. Sus trabajos giran en torno a la superficie ocular y las lentes de contacto.
En este curso tratarán de presentar los principales test utilizados para la evaluación de la película lagrimal y el diagnóstico del ojo seco, incidiendo en estrategias para favorecer la fiabilidad de los mismos y evitar la comisión de errores que dificulten el correcto diagnóstico.
¿En qué va a consistir el curso 'Ojo seco y lentes de contacto: protocolos' que imparten ambos?
En el curso se van a aportar conocimientos teóricos con una aplicación clínica directa sobre la evaluación de la película lagrimal como paso previo a la adaptación de lentes de contacto. Se describirán los pequeños errores que cometemos con frecuencia y que invalidan, en parte, muchos de los test empleados, ofreciendo alternativas y consejos para evitarlos. Se mencionarán test fáciles de realizar en la consulta diaria que pueden pasar a ampliar nuestro arsenal de pruebas para un paciente con síntomas de ojo seco.
Finalmente, se describirá el efecto de la adaptación de una lente de contacto en un paciente que refiere incomodidad con lentes de contacto, y se discutirá la multitud de factores que las investigaciones más recientes han evidenciado relevantes para la comodidad de los usuarios, teniendo en cuenta que la incomodidad a lo largo del día es uno de los motivos más frecuentes del abandono del uso.
Uno de los objetivos de este curso será dotar al óptico-optometrista de una serie de herramientas diagnósticas y terapéuticas para mejorar el resultado de la clínica diaria de la superficie ocular y las lentes de contacto. ¿Podrían detallar con brevedad cuáles son algunos de estos instrumentos, cómo se aplican y qué ventajas pueden aportar tanto para el profesional que los pone en práctica como para el paciente?
Uno de los instrumentos más útiles y que pocos profesionales emplean son los cuestionarios normalizados de síntomas, como por ejemplo el OSDI. Se ha demostrado una gran divergencia entre síntomas y signos en pacientes con lágrima marginal y ojo seco. En el curso se discutirán los motivos de algunas de estas discrepancias, ya sea incidiendo en qué miden exactamente los cuestionarios, y cómo lo hacen, ya sea describiendo algunos errores que cometemos en la realización de pruebas diagnósticas.
Las ventajas de una evaluación exhaustiva de la película lagrimal son varias, desde la mejora en la salud visual y ocular de nuestros pacientes, a la correcta selección del material, régimen de uso y cuidado de las lentes de contacto. Como profesionales sanitarios debemos proporcionar soluciones a nuestros pacientes, o saber derivar cuando sea realmente necesario.
¿Qué se van a encontrar los ópticos-optometristas en este curso y qué pueden esperar de él?
Creo que todo curso de esta naturaleza debe ser eminentemente práctico y directamente aplicable. La idea es que los asistentes puedan aplicar muchos de los conceptos expuestos en el curso el próximo día que se encuentren en la consulta.
Además, dado el avance a pasos agigantados de la ciencia y la tecnología, intentaremos dotar a los asistentes de los conocimientos necesarios para perseguir nueva información relacionada con la película lagrimal y la (in)comodidad con el uso de lentes de contacto, y para saber valorar críticamente, en el marco de la evidencia científica, esta información.
¿Por qué hay que ser conscientes de la importancia del problema de la incomodidad con las lentes de contacto (ILC) en la práctica diaria?
Muchas veces se habla de cómo conseguir incrementar el número de usuarios de lentes de contacto de nuestras consultas. Una respuesta, evidente, es evitando perder los usuarios que ya han depositado la confianza en nosotros. Si tenemos en cuenta que la incomodidad, principalmente hacia el final del día, es uno de los motivos más frecuentes del abandono de las lentes de contacto, atacar de frente esta incomodidad es crucial. Y no basarnos solamente en medidas paliativas, como pueden ser los sustitutos lagrimales, sino intentar llegar a la raíz de la incomodidad.