Las personas con patologías oculares que afectan a la visión central pueden recuperar la habilidad para leer de forma rápida y cómoda utilizando dispositivos electrónicos de lectura, según un estudio llevado a cabo por investigadores de la Robert Wood Johnson Medical School en New Jersey (Estados Unidos).
En concreto, la investigación ha determinado que las personas que padecen una pérdida visual moderada pueden aumentar la velocidad de lectura en una media de 15 palabras por minuto. La utilización de dispositivos con pantallas retroiluminadas en el estudio se tradujo en las mayores velocidades de lectura para todos los participantes, con independencia de su nivel de agudeza visual. La clave de este fenómeno reside en la sensibilidad al contraste, ya que su pérdida resulta muy común entre personas con baja visión. El alto contraste entre las letras y el fondo que proporcionan las pantallas retroiluminadas supone una gran ventaja para estos pacientes. Por el contrario, según el estudio, las personas con la mejor visión seguían prefiriendo la letra impresa.
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