El doctor en Optometría César Villa imparte este sábado 21 de septiembre el curso ‘Topografía Corneal y Aberrometría Ocular’ en la sede del Colegio Nacional de Ópticos-Optometristas.
Conocido por todos los ópticos-optometristas de España, César Villa es un buen ejemplo de la evolución de la contactología. Diplomado en Óptica por la Universidad Complutense de Madrid y en Óptica y Optometría por la Universidad de Granada, es bachelor y máster en ciencias optométricas clínicas por el Pennsylvania College of Optometry de Filadelfia (EEUU).
Experto en córnea irregular y ortoqueratología nocturna, lleva a sus espaldas más de 60 publicaciones en revistas de prestigio y varios libros publicados.
En este curso, César Villa quiere dar a conocer cómo se representa e interpreta la topografía corneal y la aberrometría ocular, aplicando para ello los conocimientos adquiridos al análisis de la calidad de la visión de pacientes con patología corneal.
¿Cuáles son los principales objetivos del curso? ¿Qué pueden esperar los ópticos-optometristas de esta formación?
Al acabar esta formación el alumno deberá de ser capaz de interpretar la topografía y la aberrometría corneal, así como la aberrometría ocular. Y, sobre todo, comprender la relación existente entre ellas y su repercusión en la visión.
¿Por qué es necesario un curso como este? ¿Qué repercusión tiene la topografía corneal y la aberrometría ocular en la calidad visual?
Más del 70% del poder refractivo del ojo se debe a la córnea. Por ello, cuando en la córnea existe cualquier anomalía en su regularidad y/o simetría la visión se ve afectada. Esto es debido a que las alteraciones de la forma, de la regularidad y/o de la simetría aumentan las aberraciones corneales y oculares, o rompen el equilibrio entre ellas, mermando la calidad visual.
¿Cuentan los ópticos-optometristas de este país con la formación necesaria para enfrentarse a situaciones de patología corneal?
Si bien el diagnóstico de la patología corneal corresponde al médico oftalmólogo, es muy importante, para que este sea precoz, que el óptico-optometrista realice, e interprete adecuadamente, la topografía corneal en el protocolo básico de todas sus revisiones. Razón por la que la formación en estas técnicas es fundamental.
¿Cuál es el caso más complejo al que se ha enfrentado y cómo se resolvió?
Los casos más complejos a los que me he enfrentado lo han sido por existencia de córnea irregular, bien por patología, traumatismo o procedimientos quirúrgicos de modulación de la refracción. Y las soluciones casi siempre fueron la adaptación de lentes de contacto a medida en que la topografía corneal y la aberrometría ocular fueron mediciones imprescindibles para su adaptación.