Al contrario de la creencia generalizada, según una reciente investigación que se publica en la revista PLos ONE, la mentira no se puede detectar a través de los ojos.
Al contrario de la creencia generalizada, según una reciente investigación que se publica en la revista PLos ONE, la mentira no se puede detectar a través de los ojos. El profesor Richard Wiseman, de la Universidad de Hertfordshire (Reino Unido), y la doctora Caroline Watt, de la Universidad de Edimburgo, comprobaron la veracidad de esta idea grabando a un grupo de voluntarios que, de forma alternativa, mentían o decían cosas ciertas. A partir de estas imágenes, se codificaron cuidadosamente los movimientos oculares de todos los participantes.
“Los resultados del experimento revelaron que no existe ninguna relación entre el acto de mentir y el movimiento de los ojos”, afirma Wiseman.